3. Tu fotografía está profundamente arraigada en las relaciones (casi íntimas) que estableces con los sujetos. ¿Podría contarnos más sobre cómo se acerca e interactúa con las personas que desea retratar?
Con mi trabajo he tenido el privilegio de conectar con diversas personas donde las relaciones basadas en el respeto y la admiración crecen y se mantienen. Mi acercamiento con ellos es muy orgánico y honesto, les explico cuál es mi objetivo con el proyecto, y de esta manera establezco una colaboración con ellos.
Por ejemplo, el proyecto Develando la belleza en Chuao para PhotoVogue y PUIG fue una pieza muy colaborativa con las personas retratadas en las imágenes. Tibisay Planchez, diseñadora de vestuario y creadora, fue fundamental en el proyecto ya que las piezas que realizó eran su propio arte y artesanía. Mi relación con ella se basa en el respeto y la confianza que le tengo y viceversa. Ella sabía que mi objetivo era celebrar el talento, las tradiciones y la magia de un lugar como Chuao y, lo más importante, de la gente de Chuao. Cada persona que participó ha dejado una huella en mí: una huella de perseverancia, resiliencia y compromiso de mostrar Venezuela a través del talento que tenemos, el cuidado que nos tenemos unos a otros y la belleza de nuestra tierra y comunidad. También creo que he dejado una huella en las personas con las que he trabajado: en cada lugar que dejo después de rodar un proyecto siento la tristeza de decir adiós que viene de ambas partes. Es como si pudiera realizar proyectos a largo plazo en la mayoría de los lugares donde fotografío, pero siento que no tengo suficiente tiempo para hacerlo.
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