Para su colección otoño 2022, Patricio Campillo se inspiró en la leyenda maya de los Nahuales, quienes son hombres que se transforman en animales. En su momento, la referencia iba de la mano de los cambios que atravesaba su propia marca. Dos años más tarde, ha vuelto a ese mismo concepto, esta vez mirándolo a través de la visión de Kafka. La metamorfosis.
“El otoño es una exploración de transformación e identidad; ahondando en la noción filosófica y casi romántica de que nosotros, como la serpiente que muda de piel, siempre estamos en estado de cambio”, explicó el diseñador. Esta temporada también buscó inspiración en la Charrería, la centenaria tradición ecuestre mexicana con códigos y técnicas propios dominados por hábiles artesanos con los que trabaja Campillo. Esto fue más evidente en la paleta de colores cobre, negro, gris y marrón; así como su uso de la sastrería y la ornamentación, presentando un abrigo de seda que tardó 250 horas en confeccionarse.
Campillo presentó esta colección en París como parte del Premio LVMH de este año, donde quedó semifinalista, convirtiéndose en el primer diseñador mexicano en recibir la distinción. Aunque lo que lo inspira es el impulso de cambio y transformación, también se ha preocupado de establecer sus propias marcas que sean apreciadas por los entusiastas de la moda. Viendo su evolución a lo largo de sus últimas tres colecciones, es evidente que ha llevado la estética mexicana a otro nivel de sofisticación que le permite coquetear con nuevas versiones de sí mismo cada temporada. Sólo esperamos que no se sienta cómodo en esta zona y siga esforzándose por cambiar, no sólo con sus referentes, sino también con su ropa.
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